Las bondades que poseen las disciplinas circenses van más allá de su contenido técnico y artístico. Es decir, su objetivo no sólo trata de formar seres humanos que ejecuten cosas extraordinarias para sorprender a sus semejantes, sino además, su práctica debe permitirles asimilar un mensaje mucho más profundo que los ayude a edificar una vida personal más completa. El desarrollo de las capacidades que hoy conocemos como circenses, se sustentaban en la voluntad inquebrantable que tenemos los seres humanos por alcanzar la perfección.
Por tal motivo, las manifestaciones de habilidad, destreza y fuerza se dan como una exposición ritual que además de pretender la perfección del cuerpo humano, las inspira el deseo de crear un lenguaje que permita acercarnos a lo divino; en la actualidad el circo es entendido como el arte de la precisión, la búsqueda por ejecutar cosas prodigiosas con su cuerpo, el artista de circo se involucra en la repetición obstinada de ciertos ejercicios que ha de lograr dominar al paso del tiempo. Se sabe que un acto de malabares desarrolla en el ejecutante la fuerza motriz y emplea los dos hemisferios del cerebro. Los actos de grupo desarrollan el sentido del compañerismo en el marco del trabajo colectivo.
En cuanto al circo de los valores, este conjuga gran sustento pedagógico articulado, cada uno de los programas y direcciones que proyectan los programas educativos de la Secretaria de Educación, basados en los valores que se deben retomar de forma constante en las aulas de clases a través de las tres líneas estratégicas del proyecto educativo regional con sus políticas educativas, emprendimiento, educación para la paz y calidad educativa; la primera busca un proceso creativo, a través de un sistema organizado de relaciones interpersonales
para desarrollar actitudes y aptitudes que promuevan acciones innovadoras, de liderazgo y proactivas, orientadas a identificar oportunidades para generar un bien común que trascienda al ámbito social, cultural, económico ambiental para el mejoramiento de la calidad de vida.
La segunda fomenta la formación basada en valores para alcanzar el desarrollo integral del ser mediante la convivencia y la consolidación de una cultura de paz que estimule la participación ciudadana a partir del manejo de la inteligencia emocional para la solución de conflictos y la tercera el proceso de gestión integral orientado hacia la formación holística de las personas para el fortalecimiento progresivo del capital humano y social como estrategia para comprometerlos en el logro de su proyecto de vida y el desarrollo social armónico con el Estado y la Nación
Estos y otros valores forman parte de las disciplinas del circo, mismas que están siendo evaluadas y justipreciadas por diversas instituciones en el mundo, como es el caso del Circo de los Valores, cuyo objetivo es ayudar a enmarcar la importancia de la unión y el trabajo en grupo para reforzar cada uno de los conocimientos a través de herramientas como los programas educativos los cuales van a darle un nuevo sentido a las necesidades del educando a partir de la convivencia basada en valores de las artes circenses.
No hay comentarios:
Publicar un comentario